LECTURA JUVENIL – INVISIBLE de Eloy Moreno

Un chico avispa con superpoderes, unos monstruos de risas y silencios, unos elefantes que se sientan en su pecho, un dragón que se revuelve en la espalda de su profesora, un guerrero luchando contra una ardilla gigante… Aunque parezca lo contrario, no se trata de un cómic, a pesar de que el protagonista de esta historia desearía parecerse a sus superhéroes favoritos y busca en ellos poderes con los que sobrevivir a la desesperanza. Eloy Moreno nos propone, a través de los ojos de un joven, una historia sobre miedos muy reales: a los golpes (tanto físicos como anímicos), al aislamiento, al fracaso y a la vergüenza de quien es humillado; a la falta de cariño, de abrazos, de besos familiares por parte del acosador; a actuar con valentía, a fallar al amigo, al hermano, al hijo, a no saber cómo ayudar a los que tenemos al lado, por parte de todos. Pero es también una historia con mucho amor: el del protagonista hacia la amiga que le hace flotar cada vez que le manda un mensaje con un corazón; el de la chica que intenta ayudarle pero llora de rabia, de impotencia, de amor…; el de una hermana pequeña cuya inocencia y cariño hacia él serán su luz entre tanta oscuridad y el de una profesora con un duro pasado que luchará para que su alumno deje de ser invisible.

Os animo a leer esta novela porque:

«¿Quién no ha deseado alguna vez ser invisible?

¿Quién no ha deseado alguna vez dejar de serlo?»

Leer…

«Leer es reconstruir mentalmente, a través de las palabras, un mundo nuevo y sentirlo real. Real en el sentido de palpable, posible, lleno de elementos, preguntas, respuestas, emociones y sentimientos. Muchas veces, nos reflejamos en lo que leemos y lo hacemos nuestro, porque la lectura nos permite entendernos, visualizar nuevos aspectos, y descubrir en nosotros mismos algo que hasta ese momento desconocíamos completamente como parte de nuestro ser, pensar y sentir.

Leer es un viaje, una búsqueda de piezas y elementos, que nos consienten armar un nuevo universo, donde encontramos huellas de nuestra propia realidad, y ya que lo que leemos tiene una fuente personal, leer es también un diálogo que nos posibilita vivir en un mundo más ancho y profundo, más rico, con más detalles y también con más misterios. Leer es vivir por dos o por tres, alargando cada minuto y ampliando el espacio y el tiempo donde se desenvuelve nuestra vida y ser.»

Pedro P. V. Meersohn

A TODOS Y CADA UNO DE MIS ALUMNOS DE 2º BACHILLERATO

Enseñarás a volar,
pero no volarán tu vuelo.
Enseñarás a soñar,
pero no soñarán tu sueño.
Enseñarás a vivir,
pero no vivirán tu vida.
Sin embargo…
en cada vuelo,
en cada vida,
en cada sueño,
perdurará siempre la huella
del camino enseñado.

(Teresa de Calcuta)

TERMINÁIS UNA ETAPA Y EN ESTE CAMINO QUE COMENZÁIS OS DESEO TODA LA SUERTE DEL MUNDO Y QUE RECORDÉIS NO YA TANTO LOS CONTENIDOS IMPARTIDOS, SINO LOS CONSEJOS QUE OS HE DADO PARA VUESTRO FUTURO ACADÉMICO PORQUE PARA LO DEMÁS, PARA LA VIDA, LOS IRÉIS APRENDIENDO VOSOTROS MISMOS…

¡MUCHA SUERTE!

QUIEN SE ATREVA A ENSEÑAR…

Educar es…
Educar es lo mismo
que poner un motor en la barca.
Hay que medir, pesar, equilibrar…
y poner todo en marcha.
Para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marinero…
un poco de pirata…
un poco de poeta…
y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar,
mientras uno trabaja,
que ese barco, ese niño
irá muy lejos por el agua.
Soñar, que ese navío,
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia islas lejanas.
Soñar que, cuando un día
esté durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos
seguirá nuestra bandera enarbolada. (Gabriel Celaya)

SOMOS LO QUE SOÑAMOS SER…

Somos lo que soñamos ser
Y ese sueño, no es tanto una meta
Como una energía
Cada día es una crisálida

Cada día alumbra una metamorfosis
Caemos, nos levantamos
Cada día la vida empieza de nuevo
La vida es un acto de resistencia y de reexistencia
Vivimos, revivimos
Pero todo se sostiene en la memoria

Somos lo que recordamos
La memoria es nuestro hogar nómada
Como las plantas o las aves emigrantes
Los recuerdos tienen la estrategia de la luz
Van hacia delante
A la manera del remero que se desplaza de espaldas para ver mejor
Hay un dolor parecido al dolor de muelas
A la pérdida física
Y es perder algún recuerdo que queremos
Esas fotos imprescindibles en el álbum de la vida
Por eso hay una clase de melancolía que no atrapa
Sino que nutre la libertad
En esa melancolía como espuma en las olas
Se alzan los sueños.


(M. Rivas)